La deformación mecánica de la tubería puede ocurrir de varias maneras, durante la construcción inicial y mediante trabajos de excavación de terceros.

Si no se detectan, los defectos resultantes pueden provocar daños graves, recubrimientos de tuberías y grietas y corrosión. La medición de geometría en línea convencional se basa en el uso de calibradores mecánicos.

El uso de la tecnología de inspección geómetra garantiza una medición directa precisa de las abolladuras con una detección de anomalías menores desde 1%. Los  datos  se reúnen en una sola inspección sin una calibración que consume mucho tiempo.

A la fecha se cuenta con más de 1,281 km inspeccionados con diámetros desde los 4in hasta 42”. Esta tecnología asegura una cobertura de 100% en la pared de la tubería y está diseñada específicamente para cubrir los rigurosos requerimientos del DOT y PHMSA.

Todos los elementos (Sensores) hacen contacto directo con la pared interior de la tubería proporcionado una completa inspección de la misma.